martes, 18 de septiembre de 2012

Stop&Stare

Supongo que habrá quien piense que pierdo el tiempo por recorrerme media ciudad en vez de coger el autobús.
Que soy infantil por emocionarme con películas de Disney.
Que estoy loca por coger el camino más oscuro hasta casa para estar más sola, porque me apetece.
Que soy una ilusa por escucharme a mi misma y dejarme llevar.
Que soy una inconsecuente por cogerme pataletas "sin derecho" de vez en cuando.
Que soy idiota por a veces volver por el barrio "chungo" para observar y ser más consciente de la suerte que tengo.
Que soy una pesada por poner diez veces seguidas la misma canción.


A todos ellos: ojalá pudiérais ver, percibir y oír lo que miro,siento y escucho yo.

lunes, 17 de septiembre de 2012

2day.




¿Lo que más me gusta de ti?

Quizás sea que sólo a través de tus ojos he visto lo que soy capaz de conseguir.

sábado, 15 de septiembre de 2012

Throwing away my breadcrumbs.

¿Conocéis esa sensación de orgullo y de mirarse al espejo y querer aplaudirse y auto-hacerse una reverencia? 
Yo no suelo experimentarla mucho, como buena virgo, pero llevo una racha de horas entre anoche y hoy en la que me siento "realizada" y necesitaba compartirlo.
Creo que estoy aprendiendo a utilizar mis talones de Aquiles como armas de fortaleza en vez de de destrucción y llevo metida en esta lucha inútil no sé...desde que tengo uso de conciencia. De conciencia de que compadeciéndome sólo me perjudico.
Una vez, una persona a la que admiro me dijo que no podemos pretender tomar decisiones sin asumir las consecuencias que estas traen y que ese era mi mayor problema en aquel momento.
Tomar decisiones siempre implica "destomar" otras y esto es lo que más miedo nos da, lo que dejamos sin tomar o el equivocarnos al decidir. Coger el camino que no es, básicamente.

No me cansaré de decir que una persona jamás deja de aprender en toda su vida y yo, como tal, a mis 25 añitos (o añazos, según se vea) creo que aprendo un poquito de algo absolutamente todos los días.
De lo que más aprendo y de lo que más me cuesta, además, es de mi misma. De mis pros y mis contras, de mis exageraciones, de mis tropiezos con la misma piedra, de mis ilusiones, de mis miedos y de mis aspiraciones.
Y días como hoy, tapo un poco los contras con los pros, me río de mis defectos y me dedico a aplaudirme, porque de vez en cuando viene bien y porque creo que me lo merezco.

Yo odio decidir. Odio decidir por lo mismo que he dicho antes. Porque escoger un camino implica a veces dejar otros. Y a veces el otro camino es bastante más cómodo y seguro. Pero no sé porqué, no hace mucho que perdí el miedo a equivocarme. Algunos lo ven como masoquismo o irresponsabilidad. Yo lo veo como una liberación. No tengo miedo a sufrir, porque se teme sobre todo a lo desconocido y yo sufrir, ya he sufrido. No me es algo que vaya a pillarme de nuevas. De lo que tengo miedo es de no darle a nada el poder de afectarme. Eso es muy triste.
Llevo un tiempo caminando por un sendero de estos hechos a mala leche. Lleno de piedras, con tormentas de vez en cuando, con viento, con bichos...y lo peor de todo, es que antes de meterme vi un letrero en el que me advertía de todo esto. ¿Por qué me metí? Porque algo me impulsó a hacerlo y ese "algo" creo que es una cosa a la que deberíamos hacer mucho más caso del que le hacemos. Porque yo he dejado de ver las piedras como molestas. Algunas las cojo y me las quedo porque me gustan, otras son tan feas e insignificantes que directamente les pego una patada y las quito de en medio y cuando alguna no la veo y me meto el hostión, me río, porque siempre me ha hecho gracia caerme. Y si me duele, me pongo Betadine, que para eso llevo mi kit de emergencias.
Respecto a las tormentas, siempre me han gustado, y ahora he decidido dejar el paraguas en casa porque es inútil con el viento y aprovecho la lluvia para quitarme el calor y para sentirme como en casa, cantando bajo la ducha. Oh yes.
El viento me sirve para secarme y porque, según la dirección que lleve, me hace ir más lento o más despacio y yo a veces no sé qué ritmo llevar.
¿Los bichos? Los bichos si no me molestan los paso de largo. Si me molestan, los elimino, que para eso soy más grande.

Estoy entretenida.
No os niego que a veces me desespero, porque hay días que quiero andar rápido porque estoy cansada y el viento me viene de frente y me ralentiza. Me frusto, me enfado y me convierto en pera, pero al final acabo andando despacito y disfrutando del paisaje. Y lo curioso es que con el tiempo me he dado cuenta de que cuando voy más despacio, disfruto más de las cosas, me duelen menos las piernas, me canso menos y casi siempre encuentro algo nuevo por el camino.

Ponedme piedras, que truene y que llueva, y que nieve, que siempre he sido de invierno. Me da igual. Si en algún momento tengo que darme la vuelta, lo sabré. Desde luego, no es ahora.  
No tengáis miedo de saber lo que queréis y no os engañéis autoconvenciéndoos de que queréis otra cosa. 


PJ.






viernes, 7 de septiembre de 2012

Lifening




"Las mejores decisiones en la vida se toman con la razón en el pecho y el corazón en la cabeza."